El test de idoneidad o evaluación de conveniencia es el instrumento a través del cual las entidades financieras que presten un servicio de asesoramiento financiero a un cliente determinado conozcan tanto la experiencia y conocimientos financieros como los fines perseguidos por el cliente al llevar a cabo una operación antes de la celebración del contrato.
Su finalidad es que las entidades tengan la información adecuada para hacer una recomendación óptima del producto al cliente en términos de inversión y riesgo. Si el producto no resulta idóneo, la entidad financiera deberá advertirlo aunque ello no resulta un impedimento para su comercialización.
Su finalidad es que las entidades tengan la información adecuada para hacer una recomendación óptima del producto al cliente en términos de inversión y riesgo. Si el producto no resulta idóneo, la entidad financiera deberá advertirlo aunque ello no resulta un impedimento para su comercialización.